Hola soy una Charonia Lampas, pero me podéis llamar "Karacola", Vivo en el Mar Mediterráneo alimentándome de erizos y de muchos tipos de estrellas de mar.

Los humanos dicen que mi carne esta buena, desde los inicios los hombres nos han cogido para muchos usos, nosotras las Charonias lampas hemos sido utilizadas como collares y adornos, también se ponían nuestras conchas en la oreja para escuchar el mar y de ese modo cubrir la añoranza de su tierra, otras civilizaciones nos han usado como alarmas, es decir, nos soplaban para alertar a las personas...

Un día dejándome llevar por la marea presencié un espectáculo digno de recordar, un millar de medusas contoneaban su cuerpo con maravillosos colores y distintos brillos. Me dejé llevar tanto por la corriente y el entusiasmo que me acerqué tanto a la orilla  y quedé atrapada, no pude dar media vuelta y regresar a mi mundo, las olas siempre me acercaban más a la orilla, pero al final tras mucho esfuerzo conseguí salir.

Después de un largo y emocionante viaje por  las costas del mar Mediterráneo, unos pescadores me encontraron y me recogieron, después me llevaron al Museo del mar del Colegio Enrique Soler a donde en la actualidad comparto espacio con    con otros tipos de animales y algunas Charonias que han ido llegando después de mí. 

En estos últimos años de retiro obligado de mi querido mar he aprendido  que mi destino sirvió para concienciar a multitud de humanos que cada vez muestran más respeto por la Naturaleza y por los mares. Estoy seguro que entre todos podremos salvar la Tierra.